Con unos ángulos nada sencillos, aprovechar bien cada rincón ha sido la prioridad al plantear el interior de este coqueto dúplex de solo 40 m².
En la planta baja de este ático completamente abierto está la zona de día, salón, comedor y cocina con acceso a la terraza y el cuarto de baño.
Subiendo por esa discreta escalera con barandilla de cristal encontramos la segunda planta, más pequeña en superficie, pero con espacio suficiente para el dormitorio con un rincón de estudio.
Desde arriba se puede ver en su totalidad la planta baja a través de las bonitas vigas de madera vista y la terraza. Bajo la escalera han hecho un par de divisiones, perfectas para almacenaje, la leña está en uno de ellos y la chimenea está metida dentro de un cajón de cemento, con un llamativo tiro en forma de tubo metálico de gran grosor, un elemento magnifico para calentar toda la vivienda en los meses de invierno.
Los muebles de la cocina y recibidor hechos a medida encajan perfectamente rellenando todos los espacios y en los techos inclinados han colocado focos empotrados para una buena iluminación.
La mesa de comedor tan grande en una vivienda tan pequeña nos dice, que su dueño recibe a menudo amigos a cenar o comer en casa, ya sabéis, que en nuestros hogares tenemos que decorar y amueblar conforme a nuestro estilo de vida y nada más.
Si la persona que viviera aquí comiera siempre solo o no invitase amigos a comer la prioridad habría sido otra ¿no? imaginad no sé, alguien que pinta en casa, pues habría bártulos y cuadros en cada rincón y eso sería lo que funcionaría de verdad para su dueñx, pero en este la prioridad es recibir invitados cómodamente.
Es una vivienda magnífica para una persona, con pocos elementos, pero muy estilosa, con terraza y vistas, que eso suple muchas otras cosas superficiales. ¿os gusta? ¡feliz jueves!
Vía: Fantastic Frank
1 Comment
Mónica
06/10/2022 at 14:15Me gustan todos los elementos y cada uno de sus rincones. Y esas vistas a los tejados …, creo que me pasaría horas mirando por el ventanal.