Al norte de Copenhague, en la pintoresca localidad de Hornbæk, se encuentra esta casa de verano que encarna a la perfección la esencia del diseño escandinavo y la profunda conexión con la naturaleza que tanto aprecian los nórdicos.
Esta vivienda de madera nos cautiva con su estética tradicional danesa. Su fachada, pintada del característico color negro alquitranado, contrasta de manera elegante con los amplios ventanales blancos que recorren gran parte de su estructura. Estos no solo inundan el interior de luz natural, sino que también ofrecen unas vistas privilegiadas del exuberante entorno que la rodea.
Al acceder al interior, la sensación de amplitud y luminosidad se intensifica gracias a una distribución abierta y fluida. El corazón de la casa, y punto neurálgico de la vida en ella, es sin duda la cocina. Abierta al salón y al comedor, se convierte en el espacio perfecto para compartir momentos y preparar deliciosas comidas con productos locales. Los muebles en color azul oscuro aportan un toque de sofisticación, mientras que la encimera de madera introduce calidez y un guiño a los materiales naturales.
La luz natural baña cada rincón, resaltando la paleta de colores neutra y relajante que predomina en la decoración. El blanco de las paredes y los techos de madera machihembrada se combina con los tonos claros de los suelos de madera y los textiles, creando una atmósfera de calma y serenidad, tan característica del diseño escandinavo.
Desde la zona de estar, la conexión con el exterior es constante gracias a los grandes ventanales que se abren a una amplia terraza con suelo de madera. Este espacio se convierte en una extensión natural de la casa durante los meses de verano, ideal para disfrutar de desayunos al aire libre, relajarse leyendo un libro o compartir una cena con amigos bajo las estrellas.
Más allá de la terraza, un gran jardín invita a disfrutar de la naturaleza en estado puro. Imaginad las tardes de verano jugando con los niños, organizando barbacoas o simplemente relajándote en una hamaca bajo la sombra de los árboles. La cercanía de la casa a la playa de Hornbæk añade un atractivo adicional, permitiendo disfrutar de paseos junto al mar y «refrescantes» baños en cualquier momento.
Pensada para acoger a familias grandes o grupos de amigos, esta casa de verano cuenta con cuatro dormitorios, ofreciendo espacio y privacidad para todos. Cada habitación ha sido decorada con el mismo de forma sencilla, al igual que el resto de la vivienda, priorizando la comodidad y la funcionalidad sin renunciar al estilo.
Esta casa de madera en Hornbæk es el refugio perfecto de vacaciones, para desconectar de la rutina y crear recuerdos inolvidables con los seres queridos. ¿Qué os parece esta escapada danesa? ¡feliz martes!
Fotos propiedad Landfolk
No Comments