La mayoría de las veces con cambiar un par de accesorios o elementos en una decoración podemos darle un toque u otro, sin necesidad de modificar todo.
El estilo escandinavo y boho están en la cima de las tendencias de decoración de interiores, y combinados, crean un ambiente acogedor y natural en el dormitorio. Esta fusión de estilos permite crear un espacio elegante y minimalista, mientras se mantiene un ambiente cálido y relajante.
El estilo escandinavo se caracteriza por la simplicidad, la funcionalidad y la naturalidad. Por su parte, el estilo boho se inspira en la cultura gitana y en la naturaleza, y utiliza elementos como textiles de colores cálidos, plantas y objetos artesanales para crear un ambiente bohemio y acogedor.
En este dormitorio han dado ese toque boho de forma magistral, sin salirse de la gama cromática escandinava e incluyendo tan solo unos poquitos elementos: el cabecero de macramé, las lámparas de mimbre, las plantas y la alfombra de algas, con tan solo eso ya han podido crear lo que se conoce como nórdico boho natural.
Por supuesto, los colores han de ser más bien neutros y naturales, como el blanco, el gris, el beige y el marrón. Los textiles también han de ser naturales y en estos colores, se encargan de aportar textura y los muebles mejor funcionales y de calidad.
Nos encanta la armonía y tranquilidad de este dormitorio con, además, bonitos detalles arquitectónicos, superelegante. El estilo boho nos gusta, pero en su pureza es demasiado colorido, el toque de texturas boho en tonos naturales, funcionan a la perfección con ambientes más nórdicos minimalistas ¿no creéis? ¡feliz lunes!
Vía: Fantastic Frank
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